Somos el resultado de nuestras decisiones, y en materia económica – financiera ocurre exactamente igual.; y por tanto una mala planificación financiera tiene consecuencias dramáticas para ti, tu familia, tus ingresos y tu patrimonio; no sólo para tu presente sino también para tu futuro.

Es curioso como muchos desean la libertad financiera, pero no hacen otra cosa que contratar productos que adolecen de flexibilidad:

  1. Te hipotecas a 30 años.
  2. Contratas un plan de pensiones que no se puede rescatar hasta 10 años más tarde de su inicio.
  3. Firmas un pias cuyo break even como el los de las aseguradoras FWU (Forward You) Liberty, Aspecta que llegan en el año 10-15… 
  4. Asumes numerosas vinculaciones en la contratación de préstamos para bajar el tipo de interés y toda la vida del mismo.
  5. Por eludir el pago de las comisiones mantenimiento de la cuenta corriente asumes el compromiso de domiciliar recibos.

Obligaciones, compromisos, limitaciones; y poco a poco tu libertad se ha reducido como la de un reo en una cárcel… cuatro metros de largo por dos de ancho, un matrimonio financiero con tu banco que en ocasiones es abusivo y de difícil salida.

Al final te das cuenta de que vas más prieto que los tornillos de un submarino, porque además, no sólo es la naturaleza de los productos que contratas; sino que la ecuación de tu economía NO está correctamente formulada, ahorras lo que te sobra después de gastar; cuando lo primero que debes hacer es decidir lo que quieres ahorrar y luego adaptar tu nivel de vida a lo que sobra; y eso como consecuencia provoca:

1.- No tener un colchón para emergencias y los imprevistos se te hacen un mundo.

2.- No ahorrar.

3.- Endeudarte con préstamos personales y/o tarjetas de crédito

3.- Centrarte en el corto plazo, dejando a un lado lo que está por venir.

4.- No planificar tu objetivos vitales poniéndolos en riesgo.

5.- Pagar más impuestos de los que debes.

En definitiva, eres prisionero de tu banco, de tu falta de planificación, de productos no adecuados, de fiscalidades leoninas. Con lo que… como ya dijo el economista André Kostolany es mejor pararte a pensar sobre tu economía e ingresos que trabajar una semana para conseguirlos. 

Si! sabes donde quieres ir, pero no el cómo llegar…, si quieres divorciarte de tu banco…. Pero no te atreves por falta de tiempo, poca educación financiera, por las muchas opciones entre las que elegir y no saber cuál es la más adecuada o los cambios fiscales te abruman… estás a un mensaje de poder compartir conmigo tu situación y caminar hacia la libertad financiera, PINCHA AQUÍ.

Recuerda: El dinero no toma las decisiones, las decisiones las tomas tú

Jose Manuel Marín Cebrían
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